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Resonancias I
Emilio Mendoza, 1986-92

Ritual africano realizado para el bautizo de mi hija Elisa Shaxie

Padrinos: Maricel Nunes, con nombre de agua y aire

Carlos Orta, el duende del piso
Locación: En la colina más alta de todo San Antonio, El Faro, con mantas rojas, talco y música.
Un mechón de Elisa quedó enterrado con una prenda de regalo de los padrinos
Narradores: sus padres
E L    B A U T I Z O

En una colina bien alta,
tan alta que es el centro
de un anillo azulado
en el horizonte,
justo en el momento
cuando murmuran los grillos
y la piel se enrojiza
por el brillo amigable
de un sol complaciente...

Yo soy Maricel
la dueña del viento.
Aún siendo invisible
mantengo presencia,
soy  quien levanto
el polvo del camino
y juego a caricias
con hojas sueltas.

Adentro de tu pequeño cuerpo
un tanto de mí posees
para toda la vida
este es mi regalo:
el respiro y aliento
siempre tendrás
aún cuando me olvides.

Yo soy Carlos,
el dueño del suelo.
Mis pasos son alas
que realizan figuras
y el comienzo del cielo
alcanzo a tocar.
Tengo como sonidos
la distancia,
el tiempo y movimiento,
con que hablo y converso,
la acción es mi esencia
y te enseñaré
a andar.

La Montaña son las ideas
que siempre
querrás lograr.

Recuerda que las distancias
son diferentes
desde lejos,
y los tamaños pequeños;
que lo que buscas sólo sabrás
apenas
hasta que des comienzo.

Aunque algunas dificultades
no sean grandes y, ni las sientas,
hay otras pequeñas que sin saberlo,
te impiden el trayecto.

Acepta los baches como parte del camino,

que siempre los habrán,
grandes y pequeños, siempre.
Mantén la certeza de que
los problemas se sobrepasan,
siempre.

 Cielo encima,
los piés que pisan
todo un cielo de tierra;
donde yo, mortal,
inexplicablemente
debo siempre quedar:
Andando vivo,
o ser parte de ella,
tierra,
al yo morir.

Tierra, sobre tí
existo
aunque allá
arriba,
anhelo
y pertenezco.

 Cielo encima,
claridad de mis ojos
que de encima
todo lo ven,
tan lejos
como sienta
el amor por la vida.
Cielo encima,
de ti tendré presente,
la pasión por el infinito,
la permanencia del tiempo
y la dimensión de los seres.

Hacia ti miro,
y la vista recorre
tus paisajes:
la fantasía de
la sublime
imaginación,

ya que sólo de mí,
la mirada del sentimiento,
es la que atraviesa
tus distancias
sin yo apenas moverme.

 Elisa pequeña,
debajo del cielo
y encima,
sobre la tierra,
busca el balance:
que puedas pisar
firmemente
al ver la grandeza
de lo que te cubre.

..........Danza de la Muerte..........

Tendrás tus deberes,
si así
lo concede
tu cuerpo:
incesante respeto
a la sombra
que te acompaña
y así nunca
dejarás que te
oscurezca.

 Llegado el momento
correspondiente
en tu vida
te harás vulnerable
al necesitar convivir
con los sentimientos.


 Si crees en tu vida,
crearás vida nueva.


 Nunca te olvides
de la sombra
que te acompaña.

..........Bautizo..........

 Agua,
que existes
en todos los seres,
y de ellos eres
su cuerpo y alimento
su fresco y su sangre;

 Que el cielo
nos entrega
y a la tierra nutre,
que camina en el aire
y descansa en el mar,

 Cuéntale a Elisa
todas las cosas
que en la vida suceden
las buenas y las malas.

De tantos viajes
que llevas,
de tantos mundos y caras
que has visto.

 Cuéntale a Elisa
todas las cosas,
y que se recuerde lo bueno
y perdone lo malo.

..........se baña en agua la cabeza..........

Se abrazan padres, padrinos y niña, en círculo frotan la tierra con sus pies descalzos
y miran al cielo mientras se seca y sube el agua bendita hacia el infinito.
Estás con nosotros, Elisa Shaxie, estamos contigo.